martes, junio 26, 2018

Creadora - Curiosidades

El relato «Creadora» fue creado para el concurso «Iridiscencia», organizado por La Maldición del Escritor. Admito que, al ser el primer concurso de relatos en el que entraba, estaba muy, muy, pero que muy nervioso. A pesar de que al final, como suponía, no consiguiera nada. Pero la ilusión no me la quitó nadie.

Eso sí, estuve asustado al leer que en el comunicado del fallo se indicara que había un relato descartado. Las normas son las normas, si no se cumplen te quedas fuera. Y sí, al leer el post de LMDE pensé que igual el relato descartado era el mío. Aunque, supongo, si lo hubiese sido, me lo habrían dicho por privado, así que supondré que solamente es que no tenía la suficiente calidad. No que el relato sea malo, sino que los hay mucho mejores, y eso es lo bueno, que haya calidad a espuertas.

De todas maneras, aquí lo habéis visto, lo habéis leído... y así ha ido la cosa.

Pero a lo que vamos, ¡unas pocas curiosidades sobre «Creadora» para todo el mundo!

lunes, junio 25, 2018

Creadora - parte 2 de 2

El patio del alcázar está listo. Mesas, sillas, algo de comida y bebida para matar el tiempo, el escenario principal… Todos han trabajado a destajo para que esté a punto para la hora decisiva. 
Maya se pone bien la chaqueta. Al final ha podido dormir una siesta ligera y reparadora. No ha soñado, y eso para ella es suficiente. Mira a Pepe y a Merche, los dos vestidos igual que ella. Parecen los padrinos de alguna boda, con pantalón de pinza oscuro, chaqueta a juego y una camisa blanca. Maya sonríe al recordar que, en el pasado, tal y como le había contado Tata Celeste, las ropas eran más parecidas a las de los bufones centroeuropeos. Con el tiempo, decidieron que era mejor modernizar el vestuario, y así parecían más bien directores de orquesta… aunque desecharon la pajarita por incómoda. 
La comparación con una orquesta es acertada: las manos son una parte importante de los Creadores, dirigiendo sus creaciones. Hay quienes lo combinan con su voz, e incluso ha habido, y hay, Creadores que solo con sus palabras han sabido estar a la altura. No entre aquellos elegidos en esta Reunión, pero sí entre el público. Igual que sus familias.
Inspira y espira, inspira y espira… Maya se repite constantemente esas palabras mientras lo hace. Siente aún la mano de Lena sobre la suya. Hasta que sea su turno, su esposa va a estar a su lado. Mira a la mujer con la que comparte algo más que una vida, radiante, elegante. Sabe que a Lena no le gusta tanto lujo, pero sabe aparentar, y está tan cómoda y guapa en pantalón como con un vestido largo. Maya se ruboriza y Lena sonríe, no solo por el sonrojo de su mujer, sino también porque sabe que, con esto, Maya está más tranquila. 
Los últimos rayos del sol se resbalan como la melaza por las murallas del alcázar. La charla se reduce poco a poco, hasta que todo queda en silencio, interrumpido por alguna que otra tos. Cuando la luz del sol desaparece por fin por el horizonte, una brisa comienza a soplar. Su origen está en el escenario, a donde todos miran. Un pequeño remolino blanco se está formando, y gira cada vez más rápido, creciendo con cada vuelta. 
De repente, el torbellino estalla, un fuerte viento golpea a todos, sin tirar a nadie al suelo. El viento se recoge y del humo blanco que ha quedado en el escenario aparecen tres figuras, cada una tan alta como dos personas. Sus ropas son túnicas sencillas, también blancas, y sus cabezas son calvas, sin rasgo alguno. 
Los Artífices se alzan impasibles. El momento ha llegado. 
No hay un anuncio de quién empieza, cada uno ya sabe su orden, y lo ejecutarán todo de la forma más solemne posible en esta noche.  
Pepe es el primero. Camina hacia el escenario y observa las blanquecinas figuras sin caras. Será un público más difícil que el habitual en sus espectáculos. Está mentalizado. Sabe que puede hacerlo. Respira. Sus manos y su boca están preparados, y el vapor azulado adquiere forma… 

Creadora - parte 1 de 2


Maya Lorca mira al público congregado antes de empezar. Cierra los ojos. Respira hondo. Alza los brazos y comienza a describir amplios arcos con ellos. 
Cada movimiento está medido al milímetro, y de las manos de Maya se desprenden pequeños vapores azules que se arremolinan y pronto adquieren definición. Son animales: conejos, cervatillos, pájaros… El público observa, atento, con una emoción imposible de contener. 
Los animalitos vaporosos, de un azul brillante, se acercan curiosos a los presentes, e incluso uno de los conejos se deja acariciar por una chiquilla del público. Pero algo hace que los animales se detengan. Han aparecido otras figuras, humanas esta vez, con escopetas. Cazadores de un aspecto de lo más estereotipado, bien reconocibles. Los disparos de sus escopetas asustan a las criaturas, las balas se tornan en un humo que atraviesa a los presentes, sin hacerles daño, y ningún proyectil acierta tampoco a los animales fantasmagóricos. Las criaturas del bosque se reúnen, y sus vapores se funden, creciendo en tamaño, dando lugar a una figura gigantesca, un imponente ciervo de cornamenta intrincada, que mira a los cazadores, impotentes. Aun siendo puro humo, se puede oír el glorioso bramido del gran ciervo, que espanta a los cazadores, quienes se desvanecen para nunca volver. El animal gigante, orgulloso, también comienza a desaparecer. 
Lo que queda del vapor vuelve a las manos de Maya mientras esta termina el breve cuento del Guardián del Bosque. Abre los ojos y mira a su alrededor. Aunque sea una historia corta y muy conocida por todos, la maestría con la que Maya la ha traído a la vida sigue sorprendiendo a propios y extraños. 
Y, en ese momento, el público se desvanece, como las figuras del relato de Maya. Ni siquiera sus seres queridos están. Todos han desaparecido en un estallido de humo, y en su lugar tres figuras, blancas, altas y con rostros lisos, se materializan. 
Los vio hace veinte años, y han vuelto. Pero su situación actual es muy distinta a la de entonces: Maya no es parte del público, es una de las elegidas de la Reunión, han puesto su confianza en ella. Y los rostros sin ojos la observan... No, no solo la observan: la están juzgando. 
Uno de los Artífices alza lo que debe ser su mano. Un largo dedo la señala, y a continuación Maya puede oír una voz, tan antigua como el mundo, decir: 
—Y así termina… vuestra Historia. 
Y lo siente. Maya baja la vista hacia sus manos. Sus dedos se están convirtiendo en el vapor azulado, luego sus palmas. Intenta gritar, pero de su garganta nunca ha salido voz alguna, y menos ahora. 
Y llora. Porque es lo único que le queda. 

domingo, junio 24, 2018

Un nuevo comienzo

¡Oh, hola! Seguramente os estéis preguntando qué pasa aquí y cómo puede ser que un blog que había estado durante tanto tiempo parado, en letargo, o más bien muerto haya vuelvo a la vida.

No es sencillo. Durante bastante tiempo, el gusanillo del escritor había desaparecido, sepultado por los webcómics. Entonces, en 2012, conocí la iniciativa de NaNoWriMo y pensé que podía ser una buena oportunidad para volver a escribir. Y en parte funcionó: ya he participado en las ediciones de 2012, 2013, 2015 y 2017. De este último, de hecho, hice una pequeña crónica en mi blog personal.

Aun con esta iniciativa, seguía sin volver a la escritura como algo habitual.

Entonces empecé a presentarme a concursos de relatos. De momento, solo he entrado en dos de ellos: «Iridiscencia», un concurso para historias de género (fantasía, ciencia-ficción y terror) protagonizada por personajes LGTB, un concurso destinado a la visibilidad y la diversidad; y «Empotradoras», sobre relatos eróticos, también de género, y también en busca de la diversidad. Ni que decir que, a día de hoy, no fui seleccionado en el primero y del segundo aún no tenemos el fallo.

Ahora bien, fueron estos dos concursos los que me animaron a intentar volver de forma más habitual, y no solo con el NaNo, a la escritura.

Tampoco penséis que ahora esto va a ser en plan «relato por día, o por semana». De momento, el primer relato nuevo que veréis por aquí será el de «Iridiscencia», que se publicará mañana. Debido a que es un relato bastante largo (casi 8000 palabras), lo he dividido en dos partes, que se publicarán con una sola hora de diferencia. Como acompañamiento, el martes se publicará un post con distintas curiosidades relacionadas con dicha historia.

Y mientras el fallo de «Empotradoras» se hace esperar, volveré a los relatos basados en «Ascendancy», que también publiqué en mi blog personal, pero revisados y ampliados. Y sí, eso cuenta como fanfic, porque lo es. La cuestión está en si se quedará en aquellos 21 pequeños relatos o si habrá más. ¡A saber!

También llegará un momento en que el blog también tenga relatos en inglés. No es algo que ocurra en el futuro próximo, así que de momento los angloparlantes tendrán que esperar, y cuando llegue el momento, claro está, lo anunciaré.

Y los más viejos del lugar, al ver el blog limpito, os preguntaréis que qué pasó con los relatos que había antes.

Tranquilidad, que no se han perdido. He decidido ponerlos en descarga en estos enlaces y en formato PDF:


Ahora vendrá la pregunta que algunos se estarán haciendo: ¿y «La Leona Furiosa»? Digamos que el fanfic incompleto basado en «Megaman Zero» va a pasar por un pequeño proceso para ponerlo más decente, igual que haré con los relatos de «Ascendancy». Seguirá incompleto pese a tener algunas cosas nuevas, pero poco más.

Con todo esto, solo me queda decir...

¡Bienvenidos!